martes, 18 de noviembre de 2014

LA ROSA


Como tratar a una rosa.
Juan se sentía solo, volvía a su departamento, y el silencio era el único que lo esperaba. Juan estaba triste, Juan estaba solo, muy solo. Y Juan tuvo una brillante idea:
- Compañía, eso lo que necesito, compañía. Y alegre se puso a pensar que tipo de compañía.
De chico le habían dicho que lo ideal para compañía era una rosa. También le habían advertido que las rosas tenían espinas y que si uno no era cuidadoso, en vez de disfrutar el placer de mirarlas, tocarlas y oler el perfume que emitían, podían terminar lamentándose todo el día de que la rosa era mala, que cada vez que uno se acercaba lo pinchaba a propósito con sus espinas, y otras tantas advertencias del mismo género.

Pero para Juan el riesgo valía la pena. Quería una rosa y salió a buscarla. Y cuando uno busca mucho siempre encuentra lo que busca.
Así Juan salió decidido a la calle y, oh casualidad, a la vuelta de la oficina donde trabajaba la vio, estaba ahí delante de sus ojos, como había estado ella durante meses esperándolo y mirándolo cada vez que él pasaba, pero nunca se habían cruzado miradas. Pero esta vez Juan estaba decidido a ser feliz y se acerco directamente a ella, tan directamente que la hizo temblar.
Juan la miró, y quedó totalmente embriagado y envuelto por su perfume. Juan estaba enamorado. Luego de un rato de pleno éxtasis Juan se decidió. Dio media vuelta y encaró al padre de la dama.
- ¿Cuánto cuesta?, preguntó con voz firme.
- Veinte pesos, contestó el Vendedor de Flores, sorprendido por la pregunta tan imprevista, pues ni siquiera le había dicho buen día, y agregó ya recompuesto.
- Con diez pesos más se lleva esta maceta hermosa, señalando una roja de cerámica.
A los pocos minutos Juan salía feliz del negocio con María, pues así le había puesto de nombre a la rosa. María salió alegre a la calle, en los brazos de Juan y vestida con su hermoso vestido de maceta roja.
Juan llegó a su casa, puso a María en el mejor lugar, donde podía recibir la luz de la mañana, luego guardó el comprobante de compra de la rosa y finalmente se sentó a su lado. El resto de la tarde se deleitó mirándola y sintiéndola.
Los primeros días fueron realmente una "Luna de Miel".
A la noche Juan se llevaba a María al dormitorio para tenerla al alcance de su mano.
La luna de miel entre ellos duró poco.
Una noche Juan entre sueños acercó su mano para acariciar a María y de pronto el dolor intenso y una gota de sangre salió de su dedo índice. María, con sus espinas lo había lastimado. Juan sintió que el dolor pasaba pero volvieron a su mente las advertencias: cuidado con las rosas, cuando tu quieres brindarles amor ellas te lastiman intencionalmente con sus espinas.
Al día siguiente Juan se olvidó de ponerle agua en la maceta a la Rosa, también se olvidó de ponerla al sol, y así hizo los siguientes tres días.
Fue el sábado que Juan al entrar al dormitorio la vio.
María estaba triste, sus pétalos que antes eran hermosos, estaban caídos sobre la mesita de luz.
Su tierra reseca.
Juan sorprendido por la actitud de María, buscó la factura de compra, pues tenía anotado en teléfono del negocio de plantas y llamó para reclamar.
- ¿Qué problema tiene con la planta que le vendí? preguntó el vendedor.
-¿Qué no la riega, ni la pone al sol desde hace tres días? preguntó el vendedor indignado.
Juan cortó, medio disculpándose por su ignorancia y se puso a regar a la rosa, pero no podía evitar recordar con bronca lo que ella le había hecho: lo había lastimado cuando el se acercó, y seguramente lo había hecho con intención.
Y comenzó a regarla hasta inundarla de agua, mientras pensaba...
- Voy a inundarla bien, así no la riego por siete días.
- Voy a dejarla al sol así no necesito moverla.
Y luego Juan se fue a hacer otras cosas, sus cosas, las que eran realmente importantes para él.
Y María siguió perdiendo pétalos. Ya no emitía ningún perfume, ya no sentía la energía y la palabra de Juan, y María se dejaba morir.
Pasaron otros tres días y Juan fue a un cine solo. Durante la película vio una escena que lo conmovió, y de pronto apareció la imagen de María ante sus ojos con sus pétalos caídos. Juan sintió en el fondo de su ser que María se moría de pena, y se dio cuenta que la amaba, que extrañaba sus formas, su tersura, su perfume, y Juan salió a las corridas del cine y volvió a su casa.
Encontró a María desfalleciente, la tomó entre sus brazos, le sacó el agua en exceso de la maceta, y le habló del amor que le tenía, durante toda la noche. A la mañana la puso al sol, le agregó un poco de fertilizante, y así la cuidó en su convalecencia que duró casi un mes.
Al mes María estaba radiante y enamorada como siempre.
Y ese día Juan tomó el comprobante de compra y rompiéndolo en mil pedacitos le dijo a María
- Alguna vez creí, equivocadamente, que porque te había comprado y puesto el comprobante de compra bajo la maceta podía decirte - " soy tu dueño, y no te riego".
- Hoy me doy cuenta que nuestra relación se sustenta en cambio en el amor diario que nos podamos dar, en que yo te riegue todos los días con mi amor, mientras tu me llenas con tu hermoso perfume, tu tersura, tu compañía y y tu hermoso perfume.
Que todos los cuidados que yo te haya dispensado en el pasado, vivirán siempre como un maravilloso recuerdo, pero que no son suficientes para el día de hoy.
Y que a partir del día de hoy, para poder disfrutarte te seguiré regando día tras día.
Y además tendré presente que si me encuentro con tus espinas puede ser, que parte de la culpa sea mía por no saber acercarme a ti.


Estar enamorado

Estar enamorado, amigos, es encontrar el nombre de la vida.
Es dar al fin con la palabra que para hacer frente a la muerte se precisa.
Es recobrar la llave oculta que abre la cárcel en que el alma está cautiva.
Es levantarse de la tierra con una fuerza que reclama desde arriba.
Es respirar el ancho viento que por encima de la carne se respira.
Es contemplar desde la cumbre de la persona la razón de las heridas.
Es advertir en unos ojos una mirada verdadera que nos mira.
Es escuchar en una boca la propia voz profundamente repetida.
Es sorprender en unas manos ese calor de la perfecta compañía.
Es sospechar que, para siempre, la soledad de nuestra sombra está vencida.
Estar enamorado amigos, es descubrir dónde se juntan cuerpo y alma.
Es percibir en el desierto la cristalina voz de un río que nos llama.
Es ver el mar desde la torre donde ha quedado prisionera nuestra infancia.
Es apoyar los ojos tristes en un paisaje de cigüeñas y campanas.
Es ocupar un territorio donde conviven los perfumes y las armas.
Es dar la ley a cada rosa y al mismo tiempo recibirla de su espada.
Es confundir el sentimiento con una hoguera que del pecho se levanta.
Es gobernar la luz del fuego y al mismo tiempo ser esclavo de la llama.
Es entender la pensativa conversación del corazón y la distancia.
Es encontrar el derrotero que lleva al reino de la música sin tasa.
Estar enamorado, amigos, es adueñarse de las noches y los días.
Es olvidar entre los dedos emocionados la cabeza distraída.
Es recordar a Garcilaso cuando se siente la canción de una herrería.
Es ir leyendo lo que escriben en el espacio las primeras golondrinas.
Es ver la estrella de la tarde por la ventana de una casa campesina.
Es contemplar un tren que pasa por la montaña con las luces encendidas.
Es comprender perfectamente que no hay fronteras entre el sueño y la vigilia.
Es ignorar en qué consiste la diferencia entre la pena y la alegría.
Es escuchar a medianoche la vagabunda confesión de la llovizna.
Es divisar en las tinieblas del corazón una pequeña lucecita.
Estar enamorado, amigos, es padecer espacio y tiempo con dulzura.
Es despertarse una mañana con el secreto de las flores y las frutas.
Es libertarse de sí mismo y estar unido con las otras criaturas.
Es no saber si son ajenas o son propias las lejanas amarguras.
Es remontar hasta la fuente las aguas turbias del torrente de la angustia.
Es compartir la luz del mundo y al mismo tiempo compartir su noche oscura.
Es asombrarse y alegrarse de que la luna todavía sea luna.
Es comprobar en cuerpo y alma que la tarea de ser hombre es menos dura.
Es empezar a decir siempre, y en adelante no volver a decir nunca.
Y es, además, amigos míos, estar seguro de tener las manos puras.

El corazón Perfecto

Un día un hombre joven se situó en el centro de un poblado y proclamó que él poseía el corazón más hermoso de toda la comarca.
Una gran multitud se congregó a su alrededor y todos admiraron y confirmaron que su corazón era perfecto, pues no se observaban en el ni máculas ni rasguños.
Sí, coincidieron todos que era el corazón más hermoso que hubieran visto.
Al verse admirado el joven se sintió más orgulloso aún, y con mayor fervor aseguró poseer el corazón más hermoso de todo el vasto lugar .
De pronto un anciano se acercó y dijo: "Perdona mi atrevimiento, pero, por qué dices eso, si tu corazón no es ni tan, aproximadamente, tan hermoso como el mío, o el de tantas otras personas ?"

Sorprendidos la multitud y el joven miraron el corazón del viejo y vieron que, si bien latía vigorosamente, éste estaba cubierto de cicatrices y hasta había zonas donde faltaban trozos y éstos habían sido reemplazados por otros que no encastraban perfectamente en el lugar, pues se veían bordes y aristas irregulares en su derredor. Es más, había lugares con huecos, donde faltaban trozos profundos.
La mirada de la gente se sobrecogió ¿como puede él decir que su corazón es más hermoso?, pensaron ...
El joven contempló el corazón del anciano y al ver su estado desgarbado, se echó a reír. "Debes estar bromeando," dijo.
Compara tu corazón con el mío... El mío es perfecto. En cambio el tuyo es un conjunto de cicatrices y dolor."
"Es cierto, dijo el anciano, tu corazón luce perfecto, pero yo jamás me involucraría contigo...
Mira, cada cicatriz representa una persona a la cual entregué todo mi amor.
Arranqué trozos de mi corazón para entregárselos a cada uno de aquellos que he amado. Muchos a su vez, me han obsequiado un trozo del suyo, que he colocado en el lugar que quedó abierto. Como las piezas no eran iguales, quedaron los bordes por los cuales me alegro, porque al poseerlos me recuerdan el amor que hemos compartido."
"Hubo oportunidades, en las cuales entregué un trozo de mi corazón a alguien, pero esa persona no me ofreció un poco del suyo a cambio.
De ahí quedaron los huecos, dar amor es arriesgar, pero a pesar del dolor que esas heridas me producen al haber quedado abiertas, me recuerdan que los sigo amando y alimentan la esperanza, que algún día -tal vez- regresen y llenen el vacío que han dejado en mi corazón." "¿Comprendes ahora lo que es verdaderamente hermoso?"
El joven permaneció en silencio, lágrimas corrían por sus mejillas. Se acercó al anciano, arrancó un trozo de su hermoso y joven corazón y se lo ofreció.
El anciano lo recibió y lo colocó en su corazón, luego a su vez arrancó un trozo del suyo ya viejo y maltrecho y con él tapó la herida abierta del joven. La pieza se amoldó, pero no a la perfección.
Al no haber sido idénticos los trozos, se notaban los bordes.
El joven miró su corazón que ya no era perfecto, pero lucía mucho más hermoso que antes, porque el amor del anciano fluía en su interior.
Sí, en verdad ahora, puedo ver lo hermoso que es tu corazón.
Y tu corazón, ¿cuántas cicatrices tiene?

"Anoche me sucedió algo y pensé en mi futuro"

Así después de esperar tanto, un día como cualquier otro, decidí triunfar.....

Decidí, no esperar a las oportunidades, sino yo mismo buscarlas.

Decidí, ver cada problema como la oportunidad de encontrar una solución.

Decidí, ver cada desierto como la oportunidad de encontrar un oasis.

Decidí, ver cada noche como un misterio a resolver.

Decidí, ver cada día como una nueva oportunidad de ser feliz.

Anoche descubrí, que mi único rival no eran más que mis propias debilidades, y que en estas, está la única y mejor forma de superarnos.

Aquél día dejé de temer  a perder, y empecé a temor a no ganar.

Descubrí, que no era yo el mejor, y que quizás nunca lo fui.

Me dejó de importar, quien ganara ó perdiera, ahora mismo me importa mucho más simplemente saberme mejor que ayer.

Aprendí, que lo difícil no es llegar a la cima, sino jamás dejar de subir.

Aprendí, que el mejor triunfo que puedo tener, es tener el derecho de llamar a alguien "Amigo".

Descubrí, que el amor es más que un simple estado de enamoramiento.

Anoche, dejé de ser un reflejo de mis escasos  triunfos pasados, y empecé a ser mi propia tenue luz de este presente.

Aprendí, que de nada sirve ser luz, si no vas a iluminar el camino de los demás.

Anoche decidí, cambiar tantas cosas.....

Aprendí, que los sueños son solamente para hacerse realidad.

Desde anoche, ya no duermo para descansar..... ahora simplemente duermo para soñar.

¡EL AMOR ES UNA FILOSOFÍA DE VIDA!


"El Amor a su Tiempo"

Si tú te encuentras enamorado de una persona, que no está enamorada de ti ..... no te reproches nada a ti mismo. No hay nada de malo contigo, sino que el amor no eligió descansar en el corazón de la otra persona.

Si encuentras a alguien que está enamorado de ti, y tú no lo amas, siéntete honrado de que el amor vino, y tocó a su puerta, pero dulcemente rechaza el regalo que no puedes devolver.

Si, tú te enamoras de alguien, y está persona se enamora de ti también, y el amor elige irse, no intentes reclamarlo ó culparlo. ¡Déjalo ir!. Hay una razón poderosa y un significado.

Todo lo que puedes hacer realmente es aceptarlo de buen grado, por todo su misterio. Cuando entre a tu vida, siente como él te va llenando hasta derramarse totalmente, y entonces encuentra la manera de compartirlo con la otra persona.

Dalo a la persona que lo hizo nacer en tu vida.

Dalo a otros que sean pobres de espíritu.

Dalo alrededor del mundo, en todas las formas que puedas ó conozcas.

Es entonces que muchos que aman comenten un error, porque habiendo estado mucho tiempo sin amar, entienden el amor profundo como únicamente una necesidad del momento.

Ellos ven sus corazones como un lugar vacío, que necesita urgentemente ser llenado con el amor, y empiezan a ver el amor como si fuera algo que fluye internamente para ellos, en lugar de fluir desde ellos hacía los demás.

¡Acuérdate de eso!, y manténlo en tu corazón: el amor tiene su propio tiempo, sus propias estaciones, y sus propias razones para ir y venir.

Tú no lo puedes sobornar, coaccionar, motivar ó insistir para que se quede permanentemente dentro de ti.

Tú sólo puedes abrazarlo cuando el llega sorpresivamente, y puedes entonces repartirlo con los otros cuando el venga hasta ti.

Pero, si él elige dejar tu corazón en cualquier momento, ó el corazón de aquel a quien tú amas, no hay nada que puedas hacer al respecto, y no hay nada que debas hacer en ese momento.

El amor es, y siempre será un misterio, un enigma. Alégrate de que él haya entrado a tu vida plácidamente en algún momento de la vida.

Si tú mantienes tu corazón abierto al amor, el amor vendrá de nuevo a tí, en cualquier momento ó lugar.

¡RECUERDA QUE TÚ NO ELIGES AL AMOR!

¡EL AMOR TE ELIGE A TÍ!

El Amor

Sólo el amor obra de una manera mágica y única. Cuando hay amor nada es imposible, todo puede lograrse...
El amor no pude analizarse, no puede explicarse, sólo se siente en el corazón...
Hay quienes se preguntan por qué ése y no otro órgano ha sido elegido para representar el amor. Y... ¡la respuesta es tan obvia...!  Acaso... ¿No sentimos ante las emociones que sus latidos se aceleran y, a veces, nos parece que hasta se quiere escapar de nuestro pecho?.
Acaso... ¿No sentimos ante la angustia la sensación de que una mano férrea nos lo aprieta  hasta casi paralizarlo? Acaso... ¿Sentimos esas sensaciones en otro lado?. No; sólo en el corazón. Es el motor de nuestras emociones y alegrías. Es el blanco de nuestras tristezas y sinsabores. El amor, entonces, es algo especial. Porque puede determinar que nuestra vida tenga o no- sentido... porque puede hacernos perdurar en el tiempo. Nuestro cuerpo se  consume ante la muerte. El amor... el amor puede mantenernos vivos...

Di lo que sientes.

Siempre dí lo que sientes y haz lo que piensas...
  • Si supiera que hoy fuera la última vez que te voy a ver dormir, te abrazaría fuertemente y rezaría al Señor para poder ser el guardián de tu alma.
  • Si supiera que esta fuera la última vez que te vea salir por la puerta, te daría un abrazo, un beso y te llamaría de nuevo para darte más.
  • Si supiera que esta fuera la última vez que voy a oír tu voz, grabaría cada una de tus palabras para poder oírlas una y otra vez indefinidamente.
  • Si supiera que estos son los últimos minutos que te veo diría te quiero y no asumiría, tontamente, que ya lo sabes.
Siempre hay un mañana y la vida nos da otra oportunidad para hacer las cosas bien, pero por si me equivoco y hoy es todo lo que nos queda, me gustaría decirte cuánto te quiero y que nunca te olvidaré.
El mañana no le está asegurado a nadie, joven o viejo.

Hoy puede ser la última vez que veas a los que amas.
Por eso no esperes más, hazlo hoy, ya que si el mañana nunca llega, seguramente lamentarás el día que no tomaste tiempo para un sonrisa, un abrazo, un beso, y que estuviste muy ocupado para concederle a alguien un último deseo.

Mantén a los que amas cerca de ti, diles al oído lo mucho que los necesitas, quiérelos y trátalos bien, toma tiempo para decirles "lo siento", "perdóname", "por favor", "gracias" y todas las palabras de amor que conoces.

Nadie te recordará por tus pensamientos secretos.

Pide al Señor la fuerza y sabiduría para expresarlos.

AMISTAD, NOBLE SENTIMIENTO


La Amistad es uno de los sentimientos más nobles, más dignos y elevados de la humanidad. Es una forma de expresión del Amor que reina en el corazón de los seres y que con empeño estimula el Leonismo. Nos recuerda aquella sublime enseñanza que nos dejó Jesús, el gran León de Galilea, aquel que vino a Servir y no a ser servido, cuando nos dijo: "Amaos los unos a los otros". 

La Amistad es un elemento fundamental y la base del accionar del Leonismo. Es de tanta trascendencia que este concepto lo encontramos en los cimientos de nuestra Asociación, en nuestro Código de Etica, uno de cuyos versos señala que debemos "Practicar la Amistad como un fin y no como un medio", así como entre nuestros Objetivos, recordándonos que debemos "Unir a los socios en vínculos de Amistad, buen compañerismo y mutuo entendimiento". Es decir, que para que un Club de Leones se proyecte de manera efectiva hacia la comunidad mediante actividades de Servicio, los Leones deben estar realmente unidos por lazos de Amistad, a fin de sentir el Leonismo en lo más íntimo de su ser. Sin Amistad no hay Leonismo. 

El concepto de Amistad es entonces de fundamental importancia en el quehacer Leonístico. No debiera ser una tarea muy difícil, si consideramos que los Clubes de Leones están integrados por hombres y mujeres de buena voluntad, y de acuerdo con Cicerón "La Amistad puede existir solamente entre buenos" La verdadera Amistad, claro está. 

La Amistad, además de proporcionar a quienes la practican desinteresadamente, las mayores satisfacciones durante su existencia, les da en cierta forma la inmortalidad, haciéndolos vivir después de la muerte, en el recuerdo de quienes disfrutaron de la misma. 

En la antigüedad se representaba la Amistad como una Diosa, con la figura de una joven que tenía la cabeza ceñida con una corona de hojas de granado, con las palabras "Invierno y Verano". Ella estaba ligeramente vestida con blanco ropaje que dejaba descubierto el lado izquierdo del pecho, llevando en la falda escritas en oro las palabras: "Vida y Muerte". Con la mano derecha señalaba su corazón y unas palabras también en oro: "Cerca y Lejos". Por último, con la mano izquierda empuñaba un pequeño olmo seco, al que se enlazaba una vid. 

Podemos interpretar la representación de la Amistad con la figura de una joven, para simbolizar que ella nunca debe envejecer, aún ante el paso de los años, y que sus afectos deben ser siempre los mismos; su ligera vestimenta expresa la franqueza sincera e ingenua, desprovista de todo disfraz y disimulo, así como su blancura simboliza la inocencia que debe acompañar siempre a la verdadera Amistad. 

El pecho izquierdo desnudo es el lugar donde está el corazón, que nunca debe ocultarse a los amigos, el mismo que es señalado con la mano derecha para demostrar la fuerza que lo impulsa, cuando quiere dar a conocer sus sentimientos. La divisa: "Cerca y Lejos", asegura que su corazón permanece siempre fiel a las personas que ama, tanto si están cercanas como si se encuentran lejanas o ausentes. 

Tiene la cabeza descubierta para enseñarnos que un buen amigo manifiesta abiertamente sus pensamientos, sin secretos. La corona de flores de granado, ha sido siempre el emblema de la perfecta Amistad, ya que su color no cambia nunca y expresa la inmortalidad del sentimiento mutuo. 

La divisa "Invierno y Verano" indica que la Amistad es constante, tanto en la desgracia como en la prosperidad, representadas por las dos estaciones extremas. Finalmente, las dos palabras: "Vida y Muerte" nos indican que la Amistad es siempre la misma, tanto en vida como después de la muerte. 

Así era como simbolizaban y sentían la Amistad en la antigüedad. Cultivemos siempre este noble sentimiento, mantengamos la Amistad entre los Leones siempre fresca y alegre, cuidémosla con sinceridad, con la fuerza del corazón, tanto en la cercanía como en la distancia, manifestándola abiertamente con el pensamiento, con la palabra y sobre todo con nuestras acciones, de manera constante a través del tiempo. No dejemos que envejezcan aquellos hermosos conceptos y pensamientos sobre la Amistad, abracémosla ahora y siempre de la manera más expresiva, así como la lozana vid se abraza al olmo, aún después de seco. 

Más recientemente, el Poeta Kahlil Gibran, nos recuerda que "Vuestro amigo es la respuesta a vuestras necesidades. El es el campo que plantáis con amor y cosecháis con agradecimiento. El es vuestra mesa y vuestro hogar. Porque vosotros vais hacia él con vuestra hambre y lo buscáis con sed de Paz. Cuando os separéis de un amigo no sufráis. Porque lo que más amáis en él, se aclarará en su ausencia, como la montaña es más clara desde el llano para el montañés. Y no permitáis más propósito en la Amistad, que el ahondamiento del espíritu. Y haced que lo mejor de vosotros sea para vuestro amigo. Y en dulzura de la Amistad, dejad que haya risas y placeres compartidos. Porque en el rocío de las cosas pequeñas, el corazón encuentra su mañana y se refresca." 

El Presidente George Friedrichs nos decía: "Un amigo es alguien en quien podemos confiar, una persona con la que podemos contar cuando necesitamos ayuda, él es alguien con quien podemos compartir nuestros pensamientos más íntimos y de quien podemos aprender. El aprueba nuestro deseo de servir. Podemos esperar de él una crítica honesta y su actitud es más profunda que la cordialidad. El valoriza la Amistad como un tesoro personal. Es alguien a quien podemos abrirle el corazón y quien pone su talento y su capacidad a nuestra disposición en cualquier momento. Sí, semejante persona es un amigo". 

El Ex Presidente del Leonismo, Fernando Sobral representó en su emblema, la esencia básica del Leonismo: Servicio y Amistad, como dos gaviotas volando, una al lado de la otra, siempre juntas, en armonía, sin hacerse sombra la una a la otra, libres en el mundo de nuestros sueños, siempre en busca de nuevos horizontes. 

Con todo lo dicho y recordado hasta aquí, amigo León que lees estas líneas: ¿Sabes ya quién es tu amigo? 

Tu amigo es aquel que siendo leal y sincero, te comprende; el que te acepta como eres y tiene fe en ti, el que sin envidia reconoce tus valores, aquel que te estima y elogia sin adularte; el que te ayuda desinteresadamente y no abusa de tu bondad; el que con sabios consejos te ayuda a construir y pulir tu personalidad; el que goza con las alegrías que llegan a tu corazón. 

Tu amigo, es el que sin penetrar en tu intimidad, trata de conocer tu dificultad para ayudarte; el que sin herirte, te aclara lo que entendiste mal o te saca del error; el que levanta tu ánimo cuando está caído; el que con cuidados y atenciones quiere menguar el dolor de tu enfermedad; el que te perdona con generosidad, olvidando tu ofensa. El que ve en ti un ser humano con alegrías, esperanzas, debilidades y luchas. 

Ese es el amigo verdadero. si lo descubres.. ¡¡ Consérvalo como un tesoro !! 

Amigo

Deja que estreche tu mano, amigo Sólo por un instante.
¿Por qué te lo pido?
Porque te necesito, porque estoy herido.
Déjame estar cerca, necesito de tu  alivio.
No me hables, tu silencio es lo que pido.
Sólo...eso... amigo mío.

**********
Déjame que te cuente, la alegría que he tenido.
Deja que yo escuche, la que a tu puerta ha venido.
Compartamos los instantes de nuestros miedos vencidos.
Y, riamos de los que se asoman atrevidos.

**********
¡Qué sería de mi cielo, sin tu brillo extendido!
¡Qué sería de mi suelo, sin tu espera y tu asilo!

**********
¿Sabes, amigo mío? Cada día te bendigo,
Porque mi vida,  es vida por haberte conocido.

**********
Y doy gracias, cada día porque puedo ofrecerte,
de  mi destino, todo lo que parte o llega, sin pedirlo.

**********
Y doy gracias porque aceptas
mis defectos, mis delirios, mis alegrías,
mis penas y mis alivios.

Bendito seas, amigo, por haberte conocido.

Aquí dentro hay un montón de amor...

Tarjetas de amor y amistad,

GRACIAS Por hacer que te quiera tanto...

Tarjetas de amor y amistad,

Tu y Yo Juntos....

Tarjetas de amor y amistad,

¿Te digo un secreto?

Tarjetas de amor y amistad,

También hoy es un día para decirte...


Ya te dije que tus besos son los mas deliciosos del mundo entero..?





Te quiero Mucho...

Tarjetas de amor y amistad,

Hay que perder para ganar.

Suena fácil, incluso sencillo, pero no lo es. Hay que estar dispuestos a perder algo para ganar algo mejor. Dispuestos a perder aquello por lo que trabajamos durante mucho tiempo, para ganar algo nuevo, diferente y mejor.
Muchas veces es necesario perder para ganar… cuando estamos en una relación de pareja que se ha vuelto tormentosa, cuando esos mismos sueños que un día alimentaron nuestras vidas ya no están, cuando esa persona que era tu vida se fue, te ha sido infiel… o cuando tus amigos con los que compartías tus alegrías y penas ya no están ahí para ti, están demasiados ocupados para atenderte.
Tu matrimonio ha sido horrible, sólo deseas que todo sea un mal sueño para despertar de todas esas tristes realidades… en todas estas situaciones, es necesario perder para ganar.

Hay que perder para ganar. 
Hay que perder, soltar aquello que no nos hace bien, aunque sea algo por lo que luchamos y creímos tiempo atrás. No se puede estar todo el tiempo hablando de los sufrimientos e injusticias que vivimos, tenemos que estar dispuestos a soltar, dejar atrás… perder para ganar.
Claro que vas a sufrir, vas a llorar, pero ¿qué vale más? Supondrá un tiempo en silencio, haciendo una limpieza interior para poder salir a la luz, para poder darle a la vida otra oportunidad y tratar de vivir en forma tranquila.
Por miedo a la soledad acabamos aferrándonos a los recuerdos, a lo que hemos ganado y a lo que llevamos tiempo guardando. Todo en la vida cuesta esfuerzo, por eso cuesta soltar y perder. Pero nada en esta vida nos pertenece, ni siquiera nuestra propia vida, todo es prestado, nada es eterno… por eso te invito a hacer esta reflexión: muchas veces debemos perder para levantarnos y ganar de nuevo.
Recuerden cómo era su vida antes que llegasen tantos problemas y el sufrimiento se anidase en sus corazones. ¿Dónde quedó esa persona que eras antes, con sueños de éxito y proyectos realizados? ¿Dónde está esa persona luchadora que más de alguna vez fue modelo a seguir para otras personas? ¿Qué fue de aquella persona con propósito y visión que una vez fuiste?
Intenta buscar dentro de tu ser qué pasó con aquella persona que una vez fuiste,
y vuelve a pensar que eres muy especial.
Vuelve a creer en ti,
en tu capacidad de amar y progresar en lo que te propongas.
Vuelve a pensar que si quieres trabajar en algo, podrás hacerlo.
Vuelve a ser una persona segura de sí misma,
como lo has sido en el pasado, más que ahora...
antes de que llegara esa persona que te acabó anulando por completo.
No es nada fácil volver a reír sin parar, no es fácil cuando sólo quieres llorar. No es fácil volver a entregar el corazón cuando te lo han roto varias veces, pero se puede, si pones de tu parte podrás. Sólo necesitas ser consciente que a veces hay que saber soltar, dejar ir lo que te rodea (sea material o sentimental) y dejar marchar aquellas cosas que no te hacen feliz. 

Hay que perder para ganar, porque dentro de esa “pérdida” volverás a renacer, a vivir la vida sin estar sufriendo o sin estar todo el día hablando de tus penas… Hay vida para ti, hay esperanzas dentro del dolor, confía en Dios que así será. Haz un ejercicio;
-Respira-
Suelta…  y vuelve a vivir.

lunes, 17 de noviembre de 2014

Perder para ganar

Suena fácil, incluso sencillo, pero no lo es. Hay que estar dispuestos a perder algo para ganar algo mejor. Dispuestos a perder aquello por lo que trabajamos durante mucho tiempo, para ganar algo nuevo, diferente y mejor.
Muchas veces es necesario perder para ganar… cuando estamos en una relación de pareja que se ha vuelto tormentosa, cuando esos mismos sueños que un día alimentaron nuestras vidas ya no están, cuando esa persona que era tu vida se fue, te ha sido infiel… o cuando tus amigos con los que compartías tus alegrías y penas ya no están ahí para ti, están demasiados ocupados para atenderte.
Tu matrimonio ha sido horrible, sólo deseas que todo sea un mal sueño para despertar de todas esas tristes realidades… en todas estas situaciones, es necesario perder para ganar.

Hay que perder para ganar. 
Hay que perder, soltar aquello que no nos hace bien, aunque sea algo por lo que luchamos y creímos tiempo atrás. No se puede estar todo el tiempo hablando de los sufrimientos e injusticias que vivimos, tenemos que estar dispuestos a soltar, dejar atrás… perder para ganar.
Claro que vas a sufrir, vas a llorar, pero ¿qué vale más? Supondrá un tiempo en silencio, haciendo una limpieza interior para poder salir a la luz, para poder darle a la vida otra oportunidad y tratar de vivir en forma tranquila.
Por miedo a la soledad acabamos aferrándonos a los recuerdos, a lo que hemos ganado y a lo que llevamos tiempo guardando. Todo en la vida cuesta esfuerzo, por eso cuesta soltar y perder. Pero nada en esta vida nos pertenece, ni siquiera nuestra propia vida, todo es prestado, nada es eterno… por eso te invito a hacer esta reflexión: muchas veces debemos perder para levantarnos y ganar de nuevo.
Recuerden cómo era su vida antes que llegasen tantos problemas y el sufrimiento se anidase en sus corazones. ¿Dónde quedó esa persona que eras antes, con sueños de éxito y proyectos realizados? ¿Dónde está esa persona luchadora que más de alguna vez fue modelo a seguir para otras personas? ¿Qué fue de aquella persona con propósito y visión que una vez fuiste?
Intenta buscar dentro de tu ser qué pasó con aquella persona que una vez fuiste,
y vuelve a pensar que eres muy especial.
Vuelve a creer en ti,
en tu capacidad de amar y progresar en lo que te propongas.
Vuelve a pensar que si quieres trabajar en algo, podrás hacerlo.
Vuelve a ser una persona segura de sí misma,
como lo has sido en el pasado, más que ahora...
antes de que llegara esa persona que te acabó anulando por completo.
No es nada fácil volver a reír sin parar, no es fácil cuando sólo quieres llorar. No es fácil volver a entregar el corazón cuando te lo han roto varias veces, pero se puede, si pones de tu parte podrás. Sólo necesitas ser consciente que a veces hay que saber soltar, dejar ir lo que te rodea (sea material o sentimental) y dejar marchar aquellas cosas que no te hacen feliz. 

Hay que perder para ganar, porque dentro de esa “pérdida” volverás a renacer, a vivir la vida sin estar sufriendo o sin estar todo el día hablando de tus penas… Hay vida para ti, hay esperanzas dentro del dolor, confía en Dios que así será. Haz un ejercicio;
-Respira-
Suelta…  y vuelve a vivir.

Pero da gracias a Dios que no lo es...

Tarjetas de reflexión,

Gracias Dios por lo que tengo

Aunque me tapo los oídos con la almohada
y grito de rabia cuando suena el despertador...
Gracias a Dios que puedo oír.
Hay muchos que son sordos.
Gracias Dios por todo cuanto me das.
Aunque cierro los ojos cuando,
al despertar, el sol se mete en mi habitación...
Gracias a Dios que puedo ver.
Hay muchos ciegos.

Gracias Dios por cada nuevo amanecer 
Aunque me pesa levantarme y salir de la cama...
Gracias a Dios que tengo fuerzas para hacerlo.
Hay muchos postrados que no pueden.
Aunque me enojo cuando no encuentro mis cosas en su lugar
porque los niños hicieron un desorden...
Gracias a Dios que tengo familia.
Hay muchos solitarios.
Aunque la comida no estuvo buena y el desayuno fue peor...
Gracias a Dios que tengo alimentos.
Hay muchos con hambre.
Gracias Señor
Aunque mi trabajo en ocasiones sea monótono rutinario...
Gracias a Dios que tengo ocupación.
Hay muchos desempleados.
Aunque no estoy conforme con la vida,
peleo conmigo mismo y tengo muchos motivos para quejarme...
Gracias a Dios por la vida.
Aunque el dinero no me alcance para zapatos nuevos...
Gracias padre celestial, pues tengo pies...
Hay quienes no los tienen.

Gracias por lo que tengo
Cuando veo mis manos maltratadas,
por el trabajo, y mi bajo salario…
Gracias Señor, pues tengo manos...
Algunos no tienen manos.
Cuando me quejo del pago de servicios
y veo que no me alcanza...
Gracias padre de los cielos,
hay muchos que carecen de todo.

Gracias Dios
Gracias padre celestial por el aire que respiro...
Porque sigo respirando...
cuando muchos han dejado de hacerlo hoy.
Son tantas las cosas que tengo que agradecerte...
Por cada día que me permites despertar a la vida...
Gracias Dios mío.

Algo que hoy y siempre quiero regalarte...

Hay cosas que quisiera regalarte siempre,
estas son algunas de ellas:

Amistad…
para que cuando tu alma añore un amigo,
sin pensar lo busques, y ese alguien corra a tu lado.
Te regalo mi amistad

Sonrisas…
para que cuando tus lágrimas se deslicen
por tu mejilla en un día gris y oscuro,
sean las risas las que iluminen tus tristezas.
Te regalo sonrisas

Grandes sueños…
para que cuando en tu mente exista un vacío,
sean aquellos bosques cubiertos de invierno
los que atrapen la atención de tu pensamiento.

Te regalo grandes sueños

La fuerza de unas manos…
para que cuando tus tobillos se cansen,
los hombros de alguien te sirvan
y den fuerzas para andar.
Te regalo mi ayuda

Un ramo de abrazos…
para que cuando los tropiezos te dificulten el andar,
sean los ánimos una esperanza
que te ayuden a continuar.
Te regalo mis abrazos

Una estrella joven y brillante…
para que cada vez que el sol descanse,
sea esa fiel luz, la que te acompañe.
Te regalo paz y descanso

Un pedacito de humildad…
para que cuando los éxitos engrandezcan tu persona,
sea la sabiduría, el aire mágico que te haga valorar,
lo que otros desprecian al llegar a una nueva orilla.
Te regalo sabiduría

Mi cariño sincero…
para que cuando sientas que nadie te acompaña,
recuerdes que en paisajes verdes o valles áridos,
mi pensamiento siempre te lleva de la mano.
Te regalo mi cariño

Un abrazo inmenso…
para que cuando necesites sentir tus fuerzas
sean estos abrazos, el puerto de tus emociones.
Te regalo un abrazo inmenso

Un par de lágrimas…
para que se alberguen entre tu alma y corazón,
así, si algún segundo la soberbia daña tu andar,
sea una muestra de sensibilidad ajena,
la que te ayude a no cometer injusticias.
¿Y un par de lágrimas?

Hoy quiero desearte....
que compartas tus alegrías con los seres que amas,
para que cuando creas que caminas en la soledad,
mil angelitos resguarden tu mirada.
Te regalo mis mejores deseos

Hoy quiero obsequiarte...
lo más bello que puedas recibir;
mientras transformas estas líneas en un espejo
donde encuentres ternura y belleza
en tu mirada sonriendo.
Te regalo mis mejores obsequios
Este tipo de regalos
crecen y más grandes se hacen,
cuanto más se comparten.
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